María Echeverría: La necesidad de los servicios es palpable detrás del mostrador
La farmacia Estrella Cassillas cumple 30 años. Situada en el centro histórico de Fuente del Maestre, una localidad de 7.000 de la provincia de Badajoz, tiene una amplia cartera de servicios que les ha permitido diferenciarse, evolucionar y ganarse la confianza de los pacientes durante todos estos años. Hablamos con María Echeverría una de los cinco técnicos que trabajan en esta oficina e hija de la titular.
30 años de servicio al paciente avalan a la farmacia Estrella Cassillas. Situada en el centro histórico de Fuente del Maestre, una localidad de 7.000 habitantes de la provincia de Badajoz, cuenta con una cartera de servicios farmacéuticos que les ha permitido diferenciarse, evolucionar y ganarse la confianza de los pacientes durante todos estos años. Hablamos con María Echeverría una de los cuatro técnicos que trabajan en esta oficina e hija de la titular.
¿En una localidad de 7.000 habitantes que servicios ofrecéis?
Durante todos estos años nos hemos identificado como una farmacia muy asistencial. Ofrecemos servicios como análisis clínicos, formulación magistral, control de la tensión arterial y peso, seguimiento de diabéticos; además ahora estrenamos una línea propia de cosmética, con champús antiparasitarios, cremas hidratantes e incluso perfumes.
Actualmente, hemos adaptado los servicios a las necesidades de nuestros pacientes y hemos añadido servicios como el SPD, nutrición y elaboración de dietas y consulta de dermoanálisis. Para este último servicio, disponemos de un dermoanalizador y estudiamos las características principales de la piel, de hidratación, elasticidad, recomendaciones solares; esta herramienta nos ayuda a que el paciente se sienta más satisfecho.
Todos nuestros servicios son remunerados. Nosotros somos ante todo profesionales de la salud y como cualquier otro servicio profesional nuestros servicios deben ser remunerado.
¿Trabajáis con un contacto directo con los profesionales médicos?
Antes, al estar el centro de salud más cerca de la farmacia trabajábamos muy directamente. En cambio ahora, al trasladarse, nos hemos alejado un poco. Yo con el SPD, por ejemplo, intento tener el máximo contacto posible con los profesionales porque los pacientes necesitan reajustes de su medicación.
¿Por qué es importante en una farmacia rural y tan consolidada como la suya ofrecer servicios?
Por que lo vemos en el día a día y porque se palpan las necesidades detrás del mostrador. No ha sido ningún capricho ni una demanda formal, simplemente ha sido el ir trabajando y el ver que eran necesarios algunos de estos servicios. También se trata de tener un acceso mejor al paciente, darle más confianza. Quizás antes se daban de una forma más ligera, y ahora han salido más protocolos y los podemos ofrecer de una forma un poco más profesional.
Al tener más confianza con los pacientes es más fácil detectar estas necesidades. Pero, ¿les transmiten su opinión sobre los servicios?
Sí. De hecho eso es lo que nos ayuda a seguir con los protocolos y a modificar lo que sea necesario. Ellos son al fin y al cabo el baremo. Eso sólo se puede hacer con confianza.
¿Algo les impide ofrecer nuevos servicios?
De hecho eso no sólo nos pasa con alguno nuevo, también con los que tenemos. El SPD, por ejemplo, lo implantamos además con un dispositivo electrónico para que nos llevase el menor tiempo posible y así poder atender al mayor número de personas, porque vimos que este problema del desorden de medicación, de la falta de adherencia, era muy palpable. La solución para una farmacia de servicios consolidada pasa por protocolizar estos servicios, por el reconocimiento por parte de todos los profesionales de la salud y remuneración por parte de la administración.
Creo que después de tantos años de historia en los que el farmacéutico ha estado al pie del cañón, con los problemas de salud de los pacientes, con los resultados de sus pruebas, y tras pasar esta crisis, nos merecemos que nos reconozcan estos servicios que hemos dado y seguimos dando.
¿La financiación es el principal reto que debe superar la farmacia de servicios para consolidarse?
Por supuesto. Al principio se debe tener ante todo motivación, se debe estar convencido de lo que se hace, pero sin financiación no es viable, acaba siendo un sueño que se queda en un sueño.
¿Qué uso hacen en la farmacia de las nuevas tecnologías para ofrecer servicios?
Estamos muy implicados en el 2.0. Disponemos de una web y una página de Facebook y publicamos periódicamente nuestras campañas de prevención en salud, etc. Además, al encontrarnos en el centro histórico de la localidad donde el acceso en coche cada vez es más limitado, nos propusimos utilizar un Whatsapp por el que la gente puede hacernos encargos y resolver dudas sobre su medicación.