Joaquín Manuel Franco y Ana Bella González: La farmacia del futuro es la farmacia de servicio
Joaquín Manuel Franco y Ana Bella González son dos farmacéuticos sevillanos. Que acaban de dar un paso decisivo en su trayectoria. Tras 19 años regentando la farmacia de Helechoza de los Montes, un pueblo de 700 habitantes de Badajoz, llevan dos meses dispensando medicamentos y ofreciendo servicios en Sevilla capital. ¿Cómo pasar de una farmacia rural a una farmacia de ciudad? ¿Cómo adaptar los servicios? Nos lo cuentan a continuación.
Joaquín Manuel Franco y Ana Bella González son dos farmacéuticos sevillanos. Que acaban de dar un paso decisivo en su trayectoria. Tras 19 años regentando la farmacia de Helechoza de los Montes, un pueblo de 700 habitantes de Badajoz, llevan dos meses dispensando medicamentos y ofreciendo servicios en Sevilla capital. ¿Cómo pasar de una farmacia rural a una farmacia de ciudad? ¿Cómo adaptar los servicios? Nos lo cuentan a continuación.
Vosotros sois de Sevilla. ¿Cómo empezáis en una farmacia rural?
Nosotros nos fuimos para diez años en un pueblo en el que la farmacia era muy reducida. Empezamos desde cero y, poco a poco, hemos ido prosperando y evolucionando. En estos 19 años hemos pasado de una farmacia totalmente rural a otra, totalmente rural pero distinta, de servicios.
¿Por qué decidís implantarlos?
Vimos que son una demanda de la sociedad. Ya no sólo vale dispensar medicamentos a pesar de que ese sigue siendo nuestro principal leitmotiv; vimos que mucha gente llegaba a nuestra farmacia y, por ejemplo, no sabía muy bien qué tenían que tomar, cómo lo tenían que tomar y decidimos hacer una dispensación activa.
Además a lo largo de tantos años siempre nos hemos ido formando, hemos insistido mucho en eso y hemos hecho muchos cursos. También nos hicimos socios de SEFAC, cosa que fue un punto de inflexión, porque ya conoces otros proyectos, gente; y gracias a eso decidimos implantar los servicios.
¿Qué servicios habéis ofrecido?
Sobre todo, SPD, revisión de la medicación, cesación tabáquica y atención farmacéutica en nutrición. El SPD es una experiencia muy gratificante porque ves que puedes ayudar, sobre todo a las personas mayores. El servicio de nutrición lo ofertamos y también fue muy demandado. En este sentido, nosotros lo que recomendamos siempre ha sido la dieta mediterránea y destacamos que lo importante es comer bien y enseñar a comer bien. Durante un tiempo el paciente viene, le contamos lo que debe hacer, y tiene que aprender cómo comer.
Nosotros somos inquietos, nos gusta avanzar, dar el mejor servicio que podamos y en ello estamos. Ahora aquí estamos poniendo en práctica lo que hemos aprendido allí.
¿Cuál es la principal diferencia que habéis observado entre ofrecer servicios en una farmacia rural a una farmacia de capital?
Las personas son distintas porque, para empezar, en el pueblo la población era mayor, y claro, el tipo de servicio que ofrecíamos era más dirigido a ese público.
Además, también son mentalidades distintas. En el pueblo, después de 19 años, la confianza que se tiene con el paciente de pueblo es mayor que la que se tiene en la ciudad. Aquí, sin embargo, encontramos más gente joven y muy informada, que pregunta más.
¿Implantaríais aquí nuevos servicios? ¿Qué os lo impide?
En la implantación de servicios, lo que más te para son los recursos, económicos o de personal. Nosotros hemos sido siempre los dos y en el pueblo ya nos iba bien porque dos farmacéuticos al servicio de 700 habitantes no está mal. Ahora aquí, quizá es más complicada toda la gestión de una farmacia de Sevilla, sobre todo ahora que estamos empezando y aprendiendo cosas nuevas. También tenemos que contar con tiempo material. Además, estamos totalmente convencidos de que los servicios deben ser pagados, porque si no los farmacéuticos no podemos asumir ese coste.
¿Los servicios son el futuro de la farmacia?
Sí, nosotros creemos que la farmacia del futuro es la farmacia de servicios. La dispensación de medicamentos es fundamental, pero eso no impide que podamos prestar muchísimos otros servicios que están relacionados con la salud.
¿En qué medida utilizáis las TIC y los recursos móviles en la farmacia?
Las utilizamos bastante y apostamos por ellas. Hemos empezado por crear una cuenta de Facebook porque queremos estar en las redes, ofertar allí nuestros servicios y que la gente sepa dónde estamos para lo que le haga falta. La tecnología es evidente que implementarla cuesta pero cuando lo está quita muchísimo trabajo, protocoliza mucho trabajo, puedes recuperar toda la información. Es fundamental tener las herramientas adecuadas.