El cuidado de la salud gástrica desde la oficina de farmacia

Los excesos en las comidas y los hábitos de salud inadecuados pueden llevar a padecer trastornos del sistema digestivo como la acidez.

Mié, 12/12/2018

Algunas épocas como la Navidad son dadas a excesos que pueden resentir el equilibrio gástrico de muchas personas. El consumo de grandes cantidades de comida y bebida pueden comportar problemas digestivos en los pacientes a los que se puede dar respuesta desde la farmacia.

Entre los diferentes problemas gástricos, uno de los más comunes es la acidez. Un 24% por ciento de los españoles lo ha sufrido alguna vez y hasta un 80% de ellos reconoce haberlo padecido al menos una vez al mes [1].

Las consultas sobre molestias digestivas son comunes en la oficina de farmacia; como profesionales sanitarios de proximidad, los farmacéuticos pueden resolver estas dudas, así como ofrecer consejo sobre cambios de hábitos o derivar al médico si es necesario.

Causas y síntomas de los problemas gástricos

El ardor de estómago suele deberse al reflujo gastroesofágico, que sucede cuando el contenido del estómago pasa al esófago. En situaciones normales, el contenido gástrico (alimentos y el propio ácido del estómago) no debería volver al esófago, lo que puede provocar lesiones en el mismo [2].

La pirosis o acidez gástrica puede darse de manera puntual, pero si es recurrente (más de dos veces por semana) pasamos a hablar de enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE), que afecta hasta a un 15% de la población [3]. Algunas de las causas más frecuentes por las que aparece son:

Comidas copiosas o el consumo de ciertos alimentos como grasas, fritos, café o chocolate.
Ciertos medicamentos, que pueden afectar a la mucosa esofágica.
El consumo de bebidas gaseosas y alcohólicas.
Situaciones como el embarazo, que puede aumentar la presión intraabdominal.
El tabaco, ya que fumar puede dificultar el aclaramiento esofágico.
La obesidad, que aumenta la presión abdominal.

Además del tratamiento farmacológico, si correspondiera, es importante contemplar los hábitos alimenticios y de otro tipo (ejercicio, fumar…) del paciente en particular. El farmacéutico puede evaluar los posibles síntomas de ERGE para recomendar un tratamiento adecuado o derivar a un especialista.

Consejos para evitar la acidez

Desde la farmacia, se pueden hacer una serie de recomendaciones para la prevención de la acidez. Es recomendable contar con un servicio de nutrición a disposición del paciente, pues la dieta puede jugar un papel fundamental para ayudar a reducir esta patología.

SEFAC propone una serie de recomendaciones para cuidar la salud gástrica y mejorar la salud y calidad de vida de los pacientes. Algunas de ellas son:

Mantener una rutina a la hora de ir al baño, con horarios fijos dentro de lo posible.
Controlar los horarios de las comidas, tratar de ser regulares.
Intentar hacer cenas no muy copiosas un mínimo de dos horas antes de ir a dormir.
Tener una alimentación equilibrada y no abusar de comidas procesadas.
Consumir mucha agua.
Masticar lentamente los alimentos.
Evitar el consumo de bebidas gaseosas, alcohol y tabaco.
Procurar no hacer ejercicio justo después de comer.
Bajar de peso y mantener una rutina de ejercicio.
Reducir el estrés.
Evitar comer ciertos alimentos en exceso como el café, los cítricos, los tomates, los ajos, las cebollas o los condimentos picantes.