Raquel Moyano: “En las oficinas de farmacia hemos sido imprescindibles para ayudar a los pacientes con sus tratamientos y enfermedades”

Cuéntanos un poco de ti. ¿Cuántos años hace que ejerces de técnico de farmacia? ¿Por qué te decidiste a ser técnico de farmacia?

Pues llevo desde agosto, cuando empecé en la farmacia de un pueblo. Aún no había terminado ni el curso cuando me llamaron para hacerme una entrevista y empezar a trabajar ahí. La verdad es que me sorprendió muchísimo ya que, actualmente, todas las ofertas de trabajo que encuentro requieren de experiencia y yo no tenía.

Así que, desde aquí, quiero decir que estoy muy agradecida de que me dieran esa oportunidad. Me faltaban las prácticas, que las empecé en septiembre y las acabé en noviembre en otra farmacia de Málaga, de la que salí muy contenta porque también aprendí muchísimo con mis compañeras y, en especial, con mi amiga Lorena, que trabaja ahí desde hace 12 años.

Realmente no es que me decidiera. Salí de la ESO y me picaba la curiosidad el Grado Medio de Laboratorio, así que me metí, pero en segundo me desanimé con química y lo dejé. Al año siguiente, no sabía dónde meterme, pero sí que quería hacer algo. Mi madre me decía que hiciera Farmacia incluso antes de meterme en Laboratorio, y gracias a ella pude hacerlo. Qué haríamos sin las madres… Y una prima mía que trabajaba como delegada de una marca fue realmente una de las personas que más me motivaban con el tema farmacia: “Raquel, métete en farmacia. Ya verás que es un mundo muy bonito, conoces un montón de gente  y aprenderás mucho”, me decía. También se lo decía a dos antiguas vecinas mías. Una de ellas es auxiliar de enfermería y, su hermana, auxiliar de farmacia, y cuando les comentaba que no sabía qué hacer, también me animaban mucho a meterme en farmacia. Así que, poco a poco, me fue picando más la curiosidad por el tema sanidad y me metí en farmacia. Ahora puedo decir que he descubierto un mundo que me enamora y del que aprendo cada día. Este año me gustaría meterme en un Grado Superior de Dietética o cualquiera de sanidad porque hay varios que me llaman la atención y, así, podré aconsejar mejor desde la farmacia.

 

Háblanos un poco de la farmacia donde trabajas. ¿Cuánto hace que está abierta? ¿Siempre ha estado en la misma ubicación? ¿La denominación de la farmacia ha sido siempre la misma?

Bueno, pues es una farmacia que lleva más de 30 años abierta. Siempre ha estado en el mismo lugar. El actual titular lleva un par de años y es una farmacia muy reconocida aquí en Vélez, Málaga. La verdad es que es una farmacia que, desde siempre, me ha gustado, a la que siempre le echaba el ojo. Tanto que, cada vez que iba, llevaba un currículum. Para mí, es un orgullo poder decir que trabajo en la farmacia Lope de Vega.

 

Cubrimos o intentamos cubrir todas las necesidades de nuestros pacientes

 

¿Cuántas personas forman parte del equipo de la farmacia?

Detrás del mostrador hay un gran equipo. Somos 14 en total. Soy la última incorporación, pero puedo decir que tengo unas compañeras increíbles y a algunas ya las conocía por el hecho de ir a la farmacia antes de empezar a trabajar.

 

¿Qué servicios ofrecéis en la farmacia? ¿Cuáles son los más importantes o los que destacaríais?

Trabajamos con bastantes servicios, ya que intentamos poder cubrir todas las necesidades de nuestros pacientes. Contamos con una dermoconsejera, servicio de nutrición, capilar, riesgo cardiovascular, diabetes, deshabituación tabáquica y SPD. A mí, personalmente, se me hace complicado escoger uno en concreto, ya que creo que todos son importantes y todos tienen una función diferente en cada paciente.

 

¿Cuál es el perfil de cliente que visita vuestra farmacia?

Tenemos todo tipo de perfiles: desde los bebés hasta los pacientes más adultos de la zona; también algunos pasajeros e, incluso, tenemos clientes a distancia, ya que también atendemos pedidos online.

 

¿Piden muchos servicios farmacéuticos?

La verdad es que sí. Al tener una variedad tan amplia de servicios, cubrimos o intentamos cubrir todas las necesidades de nuestros pacientes.

 

Una buena comunicación médico-farmacéutico hace que podamos ser más precisos a la hora de aconsejar a cada persona

 

¿Qué herramientas de comunicación usáis con el paciente? ¿Cómo os soléis comunicar con ellos?

Pues la tradicional de toda la vida: cuando los pacientes vienen a la farmacia, atendiéndoles en el mostrador, también vía WhatsApp y telefónica. Estos últimos, cada vez más, algo que es lógico, pensando en la digitalización de casi todos los comercios. También es una vía para que los clientes puedan acceder a nosotros de una manera más cómoda, fácil y segura en tiempos de pandemia.

 

¿Y con los médicos? ¿Mantenéis una relación fluida?

Cuando vemos que hay algún problema, intentamos solucionarlo poniéndonos en contacto con los médicos. Sobre todo, este último año, ya que con la pandemia, las citas presenciales con el médico no siguieron siendo posibles. Así, en las oficinas de farmacia hemos sido imprescindibles para ayudar a los pacientes con sus tratamientos y enfermedades, ya que somos los que los hemos podido ver e intentar orientar sobre las posibles patologías que se han sufrido para que los pacientes lo pudieran hablar con sus médicos.

Es una relación profesional, ya que una buena comunicación médico-farmacéutico hace que podamos ser más precisos a la hora de aconsejar a cada persona.

 

Secreto de Boticaria es una web que creé con la intención de que cualquier duda respecto a dermocosmética o algunos tratamientos médicos/farmacológicos pudiera ser resuelta sin complicación

 

Hablamos ahora de tu blog, Secreto de Boticaria. ¿Qué podemos encontrar en este espacio?

Secreto de Boticaria es una web que creé con la intención de que cualquier duda respecto a dermocosmética o algunos tratamientos médicos/farmacológicos pudiera ser resuelta sin complicación. La creé después de estar trabajando en mi primera farmacia. Viendo que no encontraba trabajo y que me gustaba, decidí iniciarme en este proyecto profesional, ya que también me ayudaría a seguir aprendiendo y atendiendo dudas de otra forma diferente.

También la creé con la idea de dar más visibilidad a los técnicos y auxiliares de farmacia como yo, ya que somos una parte muy importante en la farmacia y, por desgracia, no todos son valorados como la parte fundamental que hacen cada día trabajando.

Actualmente, hay publicaciones en ella como, por ejemplo, sobre la ansiedad, tratamiento de anticonceptivas, los principios activos en cosmética, rosácea, las patologías más frecuentes en la piel de los  bebés... Intento, poco a poco, crear más contenido para que todo el que tenga dudas pueda acceder a este y resolverlas fácilmente, como ya he dicho antes.

A día de hoy, en poco más de dos meses, ha recibido más de 30.000 visitas y es algo que agradezco mucho, ya que empecé con mucha ilusión y, que me haya visto esa cantidad de personas, me anima a seguir con ella e intentar mejorar cada día.

 

Tu perfil en Instagram, Secreto de Boticaria, es muy activo. ¿Cómo y para qué nació la idea de crear este perfil?

La verdad es que era mi perfil antes de iniciarme con la web. Cambié el nombre de Instagram a @secretodeboticaria porque, así, podría hacer publicidad de mi página y la podría ver más gente, aunque no me enfoco solo en la web. Creo que cada red social tiene su función y pienso que Instagram está para poder mostrar todo tu día a día, así que también subo algunas historias de lo que estoy haciendo en el momento o, alguna vez, hablando sobre maquillaje, ropa y varios temas, mucho más allá de la farmacia.

 

La esencia de una farmacia está en el trato personal con los pacientes

 

¿Qué importancia crees que tienen las redes sociales para el profesional de la farmacia?

Una importancia cada vez mayor, ya que podemos mostrar las novedades y curiosidades que más pueden impactar a los pacientes/clientes y hacernos más visibles. También, dando información y educando a la sociedad para que tomen conciencia de que la salud es algo primordial, y que sepan que en cada cruz verde que encuentren van a tener una oportunidad para contar sus preocupaciones y ser ayudados por grandes profesionales.

 

Por último, ¿cómo imaginas la farmacia comunitaria del futuro?

Intento imaginarla y creo que, aunque sea mucho más robotizada, no cambiará mucho respecto a cómo son ahora, ya que la esencia de una farmacia está en el trato personal con los pacientes. Se establece un vínculo emocional que es imposible romper, por muchos robots que vengan.

 

Puedes seguir a Raquel Moyano / Secreto de boticaria en Twitter, Instagram y Facebook.

 

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