Andreia Rodrigues: “En Portugal, el farmacéutico no está tan valorado como en España”
Hablamos con Andreia Rodrigues, farmacéutica portuguesa que trabaja en una botica de Madrid. En la entrevista, destaca algunas diferencias entre la farmacia de Portugal y la española.
Andreia Rodrigues
Farmacéutica portuguesa en Madrid
¿Cómo es para ti el día a día en la farmacia española?
Tengo que decir que mi día a día no es el habitual de la oficina de farmacia española. En la farmacia donde trabajo, cada día es diferente porque somos un establecimiento de mucho paso con multitud de personas diferentes, con muchas necesidades que cubrir. En resumen, te diré que divido mis funciones entre las propias del adjunto y la venta libre de dermocosmética y nutrición.
Háblanos de tu trabajo en la farmacia. ¿Qué tareas desarrollas?
Como farmacéutica adjunta, tengo mis obligaciones con la facturación y sellado de recetas, el libro recetario, los estupefacientes y la preparación del botiquín de una clínica oftalmológica, además de la atención al público en la dispensación y consejo farmacéutico. Desarrollo la parte más de contabilidad chequeando las facturas decenales de los mayoristas, laboratorios y demás proveedores.
Por otro lado, tengo parte de e-commerce, una plataforma online de productos de parafarmacia que lleva funcionando dos años y, por supuesto, el consejo de productos de dermocosmética, que ocupa una parte importante de la venta.
En España, el farmacéutico tiene una imagen muy importante para el paciente
¿Cuál es vuestro perfil de cliente?
Es un cliente que busca novedades en cuanto a cuidado de la piel, productos novedosos que no necesariamente son del canal farmacia. Hay mucho cliente de paso, aunque también hay cliente de tiempo, del barrio o de zonas cercanas que ya nos conoce y que sabe que nos formamos constantemente para poder cubrir su necesidad de la mejor manera posible.
¿Por qué decidiste trabajar en la farmacia española?
Por la experiencia de trabajar en otro país donde la cultura me fascinaba. También por la diferencia salarial que hay entre Portugal y España, ya que, en Portugal, el farmacéutico no está tan valorado como en España, en mi opinión.
¿Qué diferencias has visto entre la farmacia portuguesa y la española?
La verdad es que puedo decir que mi farmacia no es el prototipo de oficina de farmacia española, pero, fundamentalmente, en Portugal, la prescripción, posología y tiempo de la toma está mucho más clara para el paciente, lo que hace que el farmacéutico no tenga tanto trabajo a la hora de explicar cómo usar el medicamento prescrito. En España, el farmacéutico tiene una imagen muy importante para el paciente. Se puede decir que, muchas veces, nos pregunta “por no ir al médico”. Esto es muy gratificante para mí como profesional. Ayudar a las personas era uno de mis objetivos en la vida laboral.
En Portugal, la prescripción, posología y tiempo de la toma está mucho más clara para el paciente
¿El modelo farmacéutico es muy diferente?
El modelo farmacéutico es muy muy similar entre los dos países. La diferencia principal que he sentido es que, en España, cada día más, los clientes buscan alternativas naturales para prevenir, tanto a nivel de belleza (“antiaging”) como a nivel mental y físico. En Portugal, todavía estamos en una sociedad que busca el servicio farmacéutico como búsqueda en la cura o tratamiento. No como en España, donde la gente cada día más intenta prevenir.
Háblanos de los servicios farmacéuticos. En la farmacia en la que trabajas, ¿qué papel juegan?
Pues, en nuestro día a día, ejecutamos los servicios farmacéuticos más variados, como la medición de colesterol, glucemia y tensión, además de la atención personalizada, qué destacaría como punto fuerte de nuestra farmacia. Todo el equipo recibe formaciones todas las semanas de áreas variadas (dermocosmetica, EFPs, nutrición, fitoterapia...) para que, al final, el cliente pueda tener, de nuestra parte, una atención lo más profesional y adecuada a la situación.
¿Qué servicio farmacéutico que se ofrece en España aplicarías en Portugal?
En España, hacemos un servicio farmacoterapéutico con los pacientes: cada seis meses revisamos la medicación con el paciente para hacer un seguimiento de adherencia terapéutica. Hay determinadas farmacias que tienen un departamento para hacer el seguimiento con el paciente y me parece un servicio farmacéutico de elevada importancia. Así, el farmacéutico está involucrado y es una parte muy importante de la medicación al paciente. Otro servicio farmacéutico qué existe en España y que aplicaría en Portugal sería la dispensación de metadona, que aquí lo hacemos en las farmacias (como sanitarios que somos) y, en Portugal, el paciente tiene que ir a locales especializados para poder obtenerlo.
El único servicio farmacéutico que tenemos en Portugal y que aplicaría en España es la administración de vacunas e inyectables
¿Y qué servicio de farmacia de Portugal aplicarías en España?
El único servicio farmacéutico que tenemos en Portugal y que aplicaría en España es la administración de vacunas e inyectables, que debería ser un servicio a dar en las farmacias españolas. Al final, somos sanitarios y podríamos quitar trabajo a los centros de salud en épocas como la de las vacunas de la gripe, pudiendo ser todo mucho más eficiente.
Háblanos de tu trabajo actual; ¿cuántos años hace que te dedicas a la farmacia?
He empezado en esta farmacia hace casi 4 años. Vengo de trabajar en otra farmacia, en Las Rozas (Madrid), más convencional. La farmacia en la que me encuentro es totalmente diferente. Antes ya lo era, pero con la pandemia ha tenido que reinventarse y enfocarse más también en el e-commerce. Nos hemos vuelto una farmacia más global, diría yo: nos hemos actualizado y enfocado más en lo online, en poder contestar a todo tipo de clientes y de todos los lados del mundo. Es una farmacia que no se queda estancada, sino que está constantemente buscando satisfacer las necesidades de nuestros clientes, buscando productos diferenciadores e innovadores, buscando cada día tener productos que cubran todo el tipo de necesidades de nuestros clientes. La verdad es que es una farmacia innovadora donde estoy aprendiendo mucho.
¿Por qué decidiste dedicarte a la farmacia?
Es un mundo en el que debes tener mucha empatía con la gente. Me gusta ayudar y sentir que cada persona que entra en la farmacia se siente escuchada y, sobre todo, ayudarles a solucionar sus problemas.
Descubre más: