Alberto Virués, COF Cádiz: “Tenemos que ir más allá, tenemos que ocupar competencias en salud pública, en información o en formación”

En primer lugar, ¿cuándo se fundó el COF Cádiz?

El Colegio Oficial de Farmacéuticos de Cádiz se fundó en el año 1858 por Juan Bautista Chápe. Así que ya tenemos más de 150 años de existencia, lo que nos hace ser uno de los colegios de farmacéuticos más antiguos de toda España. La fundación de nuestro Colegio lo que hizo fue confirmar toda aquella experiencia que se había ido creando con grandísimos profesionales gracias al comercio que existió en Cádiz a través de su puerto marítimo, con influencia italiana, y por supuesto, todo el comercio que venía heredado de las Indias. Los farmacéuticos de Cádiz se vieron favorecidos por todo ese conocimiento que fluía en aquella época.

No podemos olvidar que por aquí pasaron todas aquellas sustancias y productos medicinales que venían de América y con los que se inició en muchos casos la síntesis de productos nuevos para Europa. Un buen ejemplo es el caso de la quinina, que se sintetizó por primera vez en la ciudad de Cádiz.

¿Qué vocalías y áreas de conocimiento cubre el colegio?

El Colegio cubre todas las áreas de conocimiento en las que se aplica la labor del profesional farmacéutico a la sociedad (farmacia comunitaria, farmacia hospitalaria, salud pública, Atención Primaria, análisis clínicos, óptica y optometría distribución, dermofarmacia, etc.).

Estamos muy sensibilizados para que todos nuestros colegiados se vean totalmente representados por su Colegio y para ello hemos creado una nueva vocalía específica de comunicación entre el Colegio y los farmacéuticos. Además de esta vocalía, estamos muy orgullosos de la nueva vocalía de desarrollo y proyectos profesionales, que creo que durante los próximos cuatro años nos va a resultar de muchísima utilidad para el desarrollo profesional de todos los colegiados. Por supuesto, estos son dos ejemplos de vocalías, pero no quita que en el resto de las vocalías estemos trabajando conjuntamente para hacer que nuestro Colegio sea puntero a nivel nacional en cada uno de sus ámbitos de actividad.

¿Cuántos farmacéuticos están colegiados? ¿Cuál es el perfil del profesional colegiado?

Las estadísticas del Colegio de Farmacéuticos de Cádiz, a fecha del pasado mes de septiembre, es que lo integramos 1946 colegiados. La gran mayoría de ellos corresponde a los colegiados que tienen su desarrollo profesional en la farmacia comunitaria, por lo que prácticamente hablamos de alrededor de unos 1300 farmacéuticos entre titulares y adjuntos, en este campo. El otro grupo importante de colegiados que pertenecen a esta corporación son los farmacéuticos de hospital y los farmacéuticos de Atención Primaria.

Además de estos grandes grupos también contamos con farmacéuticos que trabajan en la industria, en la óptica, la ortopedia, en la enseñanza y la investigación, en los laboratorios de análisis clínicos, la distribución, etc. Es decir, tenemos un perfil de lo más variado, como corresponde a nuestra profesión.

Estamos muy centrados, sobre todo con las nuevas generaciones de farmacéuticos que se están incorporando, para que vean en el Colegio una herramienta y una ayuda para su desarrollo profesional. Creo que es una responsabilidad que todos tenemos con los nuevos farmacéuticos y sus inquietudes y demandas.

 

“Estamos muy centrados, sobre todo con las nuevas generaciones de farmacéuticos que se están incorporando, para que vean en el Colegio una herramienta y una ayuda para su desarrollo profesional”

¿Qué oportunidades ofrece el COF Cádiz a sus colegiados?

Entendemos las oportunidades que el colegio puede ofrecer desde dos puntos de vista: por un lado, aquellas necesidades sobre el mejor desarrollo profesional del farmacéutico; y por otro, cubrir las necesidades e inquietudes que cada uno de ellos pueda tener.

En cuanto al desarrollo profesional del farmacéutico, coordinado con todas las vocalías del Colegio, tratamos de ofrecer cursos y programas formativos que impliquen una capacitación para la implantación de servicios profesionales asistenciales dentro de la farmacia comunitaria.

Tratamos de que cada una de las vocalías motiven a que nuestros compañeros se comuniquen y nos compartan sus peticiones e inquietudes y dentro de estas peticiones tratar de ayudar e implementar todo aquello que al final podamos realizar.

¿Qué necesidades ha identificado en los colegiados y colegiadas y cómo se abordarán para darles respuesta?

Una de ellas es lograr una mayor comunicación entre los colegiados que trabajan en diferentes ámbitos de actividad, y otra, el seguir potenciando la formación y cualificación profesional, que será uno de los pilares de nuestro proyecto. La actualización formativa es especialmente necesaria en una profesión como la nuestra y el Colegio ofrece una completa y variada agenda de cursos y talleres que tratan de ayudar a nuestros colegiados, no sólo a los compañeros de Farmacia Comunitaria, a actualizar sus destrezas profesionales. En este campo vamos a seguir trabajando desde el prisma de la excelencia, programando actividades del mayor interés y, en la medida de nuestras posibilidades, tratando de que cuenten con acreditación de calidad. Los Colegios como el nuestro están llamados a tener un papel destacado en la recertificación profesional y el camino para estar plenamente preparados para ello es esta vía.

“Lograr una mayor comunicación entre los colegiados y potenciar la formación y la cualificación profesional, son los pilares de nuestro proyecto” 

 

La farmacia comunitaria destaca por su labor asistencial. ¿Cómo valora su papel en Cádiz?

Estamos muy satisfechos de la labor que hemos llevado a cabo en la última década, lo que nos ha permitido consolidar a nuestro Colegio como una referencia nacional en el ámbito de la farmacia asistencial. Algunas iniciativas que tenemos en marcha son; el seguimiento farmacoterapéutico, las campañas de peso y salud tanto en el mayor como en los menores de edad, o servicios profesionales sanitarios como SPD (Sistemas Personalizados de Dosificación de Medicamentos), para ayudar al paciente crónico polimedicado en la organización de su tratamiento, o MAPAfarma (Monitorización Ambulatoria de la Presión Arterial desde las farmacias).

Todos estos proyectos vieron la luz en nuestra provincia y fueron compartidos con el resto de los compañeros de toda Andalucía a través del CACOF, ya que fuimos conscientes de que era algo tremendamente positivo para todos y era necesario extenderlos.

Cádiz ha tenido un papel esencial en el desarrollo de la Farmacia Asistencial andaluza y debemos perseverar en ese camino. Como refleja nuestro plan asistencial, hemos llevado a cabo cerca de una treintena de iniciativas orientadas a desarrollar y mejorar los servicios profesionales prestados a los pacientes, facilitar el acceso a la medicación, favorecer el registro y uso de datos, mejorar la comunicación entre niveles asistenciales y promover la formación del farmacéutico en patologías clave.

Aquí, además de SPD o MAPAFarma, también destacaría otros servicios profesionales como por ejemplo: Asistencia en Nuevos Medicamentos (ANM) para la mejora de la adherencia a los nuevos tratamientos; Deshabituación Tabáquica, para ayudar a las personas que quieren dejar de fumar o la campaña BenzostopJuntos, que promueve el uso correcto de las benzodiacepinas a través de la coordinación del CACOF y el Servicio Andaluz de Salud.

Por último, dos iniciativas que se han puesto en marcha en los últimos meses, como son el servicio AxónIctus para la detección precoz de la fibrilación auricular y la prevención del ictus desde la farmacia comunitaria o el proyecto PysmaSarco, para la prevención y detección precoz de la obesidad sarcopénica en personas mayores de 60 años; ambas surgidas desde el ámbito de la farmacia gaditana.

En esta nueva etapa como presidente del COF Cádiz, ¿cuáles son los principales retos que afronta?

Gracias al trabajo que se ha realizado en los últimos años, como decía antes, todos los farmacéuticos del Colegio de Cádiz tienen muy asumida la labor asistencial que debe realizar el profesional de farmacia, pero es algo que continuaremos impulsando. Mi labor fundamental va a estar dirigida a que esta labor asistencial por parte del farmacéutico sea cada vez más clínica y, por otro lado, reforzar la idea de que nuestra labor va más allá de la dispensación de medicamentos.

Tenemos que cubrir competencias en aquellos campos que la sociedad nos está demandando, hacemos una labor excepcional en todas las áreas que ya realizamos, pero tenemos que ir más allá, tenemos que ocupar competencias en salud pública, en información, en formación, en prevención, en promoción de la salud, etc. Somos los profesionales sanitarios más cercanos a la población, en los que ha depositado su total confianza y tenemos que saber responder a esta demanda de la sociedad en general.

Para ello cuento con un extraordinario equipo de Junta de Gobierno que me acompaña, un notable equipo humano que, junto con el personal de nuestra corporación, constituyen la herramienta perfecta para facilitar a los farmacéuticos de nuestra provincia su labor: contar con una interlocución ágil y resolutiva con la administración y poder emprender nuevos pasos en el desarrollo de nuestra profesión.

“El farmacéutico trabaja en muchísimos ámbitos y atiende muchas necesidades básicas y diarias del ciudadano. Pero necesitamos una mayor coordinación con múltiples instituciones”

Una de las líneas estratégicas durante este nuevo mandato, “es la apertura al resto de profesiones sanitarias y a la propia administración pública”. ¿Qué tipo de acciones están previstas para conseguir este objetivo?

Estamos en un momento de cambios estructurales en el modelo de prestación sanitaria hacia la sociedad. El sistema se encuentra cada vez más saturado, las demandas sobre el paciente crónico son cada vez más exigentes y esto nos hace que todas las profesiones sanitarias tengamos que remar en la misma dirección para conseguir una asistencia y atención de la máxima calidad posible. Por ello todos nos tenemos que poner de acuerdo y la labor de la administración pública es favorecer que todos estos encuentros se produzcan, de aumentar la colaboración entre los diferentes actores y niveles asistenciales, y conseguir una coordinación eficiente para que el ciudadano se vea favorecido de todo ello, en la mejora de su salud y calidad de vida.

El farmacéutico trabaja en muchísimos ámbitos y atiende muchas necesidades básicas y diarias del ciudadano: en que puedas beber agua todos los días y comer con garantías, que te podamos hacer pruebas diagnósticas como puede ser un análisis clínico, etc. Detrás de todo eso hay un farmacéutico. Pero necesitamos una mayor coordinación con múltiples instituciones. Por ejemplo, con la administración andaluza estamos inmersos en un proyecto de colaboración para favorecer el uso racional del medicamento a través de charlas dirigidas a colectivos vecinales. También estamos trabajando con el propósito de mejorar la comunicación entre médicos y farmacias. La Farmacia también desempeña un importante papel social en la prevención de la violencia de género y en la protección de personas vulnerables, especialmente de mayor edad, que viven solas.

Estamos tratando de tener proyectos comunes en los tres ámbitos asistenciales dándoles cabida a los farmacéuticos de Salud Pública, de análisis clínicos, de óptica y ortopedia. Asimismo, buscamos lograr apoyos con los diferentes colegios profesionales sanitarios, de Enfermería, de Medicina, de Veterinaria, de Psicología, porque, insisto, compartimos lo común, que es el paciente. Y por supuesto, como hemos venido demostrando a lo largo de nuestra historia y de forma más especial desde el impulso decidido a la Farmacia Asistencial, que tenemos que seguir colaborando con los Consejos, con el Andaluz y el General.

¿Cómo proyecta el futuro del Colegio?

Con mucha ilusión y ganas de avanzar en todas estas cuestiones que he comentado antes. El trabajo realizado ha situado a nuestro Colegio como un referente andaluz y nacional, y esa es la línea a seguir. Como señalaba, hay que avanzar en la colaboración entre niveles asistenciales y estrechar los vínculos entre los farmacéuticos de los distintos ámbitos de actividad. Somos profesionales sanitarios muy cualificados con presencia en muchos sectores. Hemos de aprovechar esa potencialidad, sumar en base a lo mucho que nos une. Cuando todos remamos en el mismo sentido se generan sinergias muy interesantes y positivas para el conjunto de la sociedad.

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