Servicio de cesación tabáquica: dejar de fumar con ayuda de la farmacia

Servicio de cesación tabáquica: dejar de fumar con ayuda de la farmacia

El programa de cesación tabáquica es una guía de actuación farmacéutica para acompañar, desde la farmacia, a las personas que desean dejar de fumar. Para que funcione con éxito, los profesionales deben formarse específicamente y tener presentes sus funciones.

En España, más de 50.000 muertes al año se atribuyen al consumo de tabaco [1]. Además, este hábito produce otras enfermedades menos graves, aunque problemáticas, que se pueden evitar o incluso revertir si se elimina la adicción.

La farmacia es el establecimiento sanitario de más fácil acceso para los pacientes. Por eso, los farmacéuticos comunitarios son los profesionales que gozan de una mayor proximidad con ellos, al mismo tiempo que son un punto de información y educación para la salud de los ciudadanos [2].

En este sentido, uno de los servicios que se ofrece en muchas farmacias es el de cesación del tabaquismo, que tiene por objetivo informar, aconsejar y acompañar a los pacientes que desean dejar de fumar. Este es un proceso de vital importancia para la salud y, por ello, hay que seguir distintos pasos para llevarlo a cabo correctamente [3].

Cómo implantar el servicio de cesación tabáquica

Para poner en marcha el servicio de acompañamiento para el abandono del tabaco, la farmacia necesita disponer de varios recursos [4]:

  • Mensajes sobre el consumo de tabaco. El espacio de la farmacia debe ser dado a reflexionar sobre esta cuestión. Es importante ofrecer información sobre los efectos del tabaco y ofertar el servicio de cesación tabáquica a través de imágenes o carteles.
  • Zona de Atención Personalizada (ZAP). Es necesario tener un espacio físico diferente al de dispensación para poder ofrecer este servicio a los pacientes. Esta zona está dedicada a la comunicación entre el equipo de la farmacia y los pacientes, ya sea presencial, telefónica o telemática. También será imprescindible garantizar la privacidad, accesibilidad y visibilidad desde todo el establecimiento.
  • Sistema de registro de la documentación. Se requiere un registro seguro para archivar y ordenar toda la información utilizada en el servicio, como informes o formularios. Se recomienda tenerlos disponibles en formato digital. También puede ser necesario acceder a la información clínica del paciente o comunicarse con otros profesionales sanitarios.
  • Fuentes de información sobre medicamentos y deshabituación tabáquica. Es conveniente poder acceder a fuentes de consulta básica sobre tratamientos concretos, así como a guías prácticas de cesación tabáquica o cursos de formación específica.
  • Equipamiento. Finalmente, hay algunos elementos necesarios para llevar a cabo el servicio correctamente:
  • Báscula
  • Tensiómetro con manguitos de distinto tamaño
  • Cuestionarios específicos

Formas de identificar una persona fumadora

El primer paso, antes de activar la guía de apoyo para dejar de fumar, será identificar las personas usuarias que tienen ese hábito y que desean abandonarlo. Esto puede llevarse a cabo de distintas maneras [5]:

  • Captación oportunista. El paciente acude a la farmacia por otro motivo y, una vez resuelta su consulta, el farmacéutico aprovecha para preguntarle por su relación con el tabaco.
  • Captación a partir de programas de prevención e intervenciones comunitarias, como planes autonómicos o nacionales para apoyar el abandono del tabaco.
  • Captación voluntaria. La persona fumadora solicita ayuda explícita para dejar de fumar.

Fases del fumador que quiere dejarlo (o no)

El consumo de tabaco es uno de los principales factores de riesgo para enfermedades cardiovasculares, además de 20 tipos de cáncer y otras enfermedades debilitantes [6]. Este hábito se sustenta por el fuerte carácter adictivo de la nicotina y, por eso, es casi imposible abandonarlo de la noche a la mañana. Para intervenir en esta adicción, es vital conocer la fase en la que se encuentra la persona fumadora [7]:

Fase de precontemplación (fumador consonante)

La persona está conforme con su hábito y no se plantea cambiarlo. Se calcula que entre el 30% y el 35% de los fumadores se encuentran en esta etapa.

Fase de contemplación (fumador disonante)

El fumador es consciente del daño que el tabaco produce a su cuerpo y desearía dejarlo, pero no puede. En este caso, se estima que un 50% de los fumadores están en esta situación.

Fase de preparación

El fumador disonante se plantea seriamente abandonar el hábito en un futuro próximo.

Fase de acción

Etapa en la que se materializa el abandono del tabaco y el consumidor empieza un cambio en su comportamiento.

Fase de mantenimiento

Periodo durante el cual el fumador mantiene la abstinencia. Está concebido que la persona pasa a considerarse ex-fumadora cuando se cumple un año desde que puso fin a su hábito.

¿Cómo determinar el grado de adicción al tabaco?

Además de identificar el nivel de motivación de la persona fumadora, será igualmente importante valorar cuál es su grado de adicción al tabaco. Para ello, existen dos métodos a los que pueden recurrir los profesionales de la farmacia [8].

Test de Fagerström

El grado de dependencia se mide a través de seis preguntas en las que se cuestionan aspectos como el número de cigarrillos que se consumen a diario, el tiempo que pasa entre cada uno de ellos o los momentos del día en los que se fuma más. A partir del resultado se establece una nota del 0 al 10, representando la primera una dependencia nula y la segunda una dependencia extrema.

Test de Richmond

Este método plantea cuatro preguntas para determinar cuán motivada está la persona fumadora para abandonar su hábito. El resultado será igualmente de 0 a 10, con tres valoraciones resultantes. Entre 0 y 4, representará una motivación baja; entre 4 y 7, una motivación media y más de 7, una motivación alta.  

Consecuencias del tabaquismo y tratamientos

Una vez que la persona fumadora se encuentra en la fase de preparación o acción, el equipo de la farmacia deberá exponerle toda la información que pueda ser de su interés, tanto para confirmar su determinación a abandonar el tabaco como para escoger el método que desea seguir. Esto es [7]:

  • Informar sobre los riesgos de salud del tabaquismo
  • Explicar las diferentes opciones para dejar de fumar
  • Aclarar que no es imprescindible seguir un tratamiento farmacológico
  • Recordar la posibilidad de acudir a su centro de salud con la recomendación del farmacéutico

Tratamientos para dejar de fumar

En cuanto a los posibles métodos para abandonar el tabaco, es importante detallar al usuario todas las opciones que están a su disposición. En este sentido, cabe destacar que la base del tratamiento será de tipo cognitivo-conductual. Es decir, el paciente tendrá que buscar herramientas para lidiar con los efectos derivados de la abstinencia, como el nerviosismo o la ansiedad.

La terapia cognitivo-conductual está considerada como una herramienta muy útil para controlar desafíos emocionales y aprender técnicas para lidiar con situaciones estresantes desde el autoconocimiento [9]. Sin embargo, acostumbra a ser más efectiva cuando se combina con otros tratamientos o medicamentos. Para dicho caso, existen distintas estrategias posibles:

  • Reducción progresiva del consumo de tabaco combinada con terapias sustitutivas con nicotina, como parches o chicles.
  • Terapia combinada en la que se añaden formulaciones de acción rápida al uso de parches de nicotina. (Terapia combinada en la que se complementa el uso de parches de nicotina con la administración de medicamentos de acción rápida para evitar el antojo.)
  • Estrategia “precarga”, compaginando el uso de parches con el consumo pautado de tabaco.

En el caso de que el paciente no mejore con ninguno de los tratamientos anteriores, se le puede recomendar que los complemente con la ayuda de un profesional de psicoterapia.

Seguir el proceso para dejar de fumar

La última parte de la tarea del farmacéutico en la cesación del tabaquismo es hacer el seguimiento del paciente que ya ha empezado el tratamiento para abandonar su adicción. Es recomendable elaborar un plan específico para aquellos usuarios que empiecen un proceso de este tipo con un objetivo múltiple [4]:

  • Educar y reforzar los beneficios del abandono
  • Identificar la falta de adherencia al tratamiento
  • Detectar la aparición de posibles efectos adversos
  • Controlar los parámetros asociados al proceso, como la tensión arterial, el pulso o el peso
  • Vigilar el síndrome de abstinencia, a partir de síntomas como la ansiedad, irritabilidad o depresión
  • Prevenir posibles recaídas
  • Proponer la intervención de otros profesionales sanitarios en caso de detectar incidencias
  • Registrar toda la información del proceso: tipo de tratamiento, efectos, incidencias, indicadores, etc.

Generalmente, el seguimiento farmacéutico se formula a través de un plan de visitas dividido en tres estadios diferentes:

  • Visita tras la dispensación. Se realiza una semana después de haber empezado el proceso para dejar de fumar para identificar reacciones adversas o falta de efectividad.
  • Visitas de seguimiento. Se llevan a cabo en las semanas 2, 4, 8 y 12. Servirán para identificar posibles efectos adversos y controlar parámetros y síndrome de abstinencia.
  • Visitas de mantenimiento. Se realizan en las semanas 18, 24 y 56 y su objetivo es informar y prevenir posibles recaídas.

NPS-ES-NP-00289

Descubre más:

La farmacia puede ayudar a dejar de fumar 

Referencias:

[1] Declaración de Madrid-2018 por la salud y para el avance de la regulación del tabaco en España. Comisión Nacional para la Prevención del Tabaquismo. Disponible en: https://cnpt.es/assets/docs/noticias/20.pdf [Acceso: 06/06/2023]

[2] Programa de Atención al Tabaquismo. Instituto Social de las Fuerzas Armadas. Disponible en: https://www.defensa.gob.es/isfas/Galerias/Prestaciones/TABAQUISMO/PROGRAMA_ATENCION_AL_TABAQUISMO_ISFAS_2020.pdf [Acceso: 06/06/2023]

[3] Programa de cesación tabáquica. Col·legi de Farmacèutics de Barcelona. Disponible en: Programa de cesación tabáquica - Col·legi de Farmacèutics de Barcelona (cofb.org) [Acceso: 06/06/2023]

[4] Especificaciones del servicio de cesació tabáquica. Sociedad Española de Farmacia Clínica. Disponible en: | Farmacéuticos Comunitarios (farmaceuticoscomunitarios.org) [Acceso: 15/06/23]

[5] Abordaje de la cesación tabáquica. Consejo General de Colegios Farmacéuticos. Disponible en: Abordaje de la cesación tabáquica - Farmacéuticos (farmaceuticos.com) [Acceso: 06/06/2023]

[6] Tabaquismo. Organización Mundial de la Salud. Disponible en: Tabaquismo (who.int) [Acceso: 06/06/2023]

[7] Casado, Elena; Arnáez, Borja y Del Arco, Juan. Tabaquismo: Abordaje terapéutico, 2006, vol. 20, nº 10, p.46 – 47. [Acceso: 06/06/2023]

[8] Actuación coordinada de la farmacia con los centros de salud en el plan integral de atención a personas fumadoras de Castilla y León. Consejo de Colegios Profesionales de Farmacéuticos de Castilla y León. Disponible en: https://www.saludcastillayleon.es/portalmedicamento/es/estrategias-programas/tabaquismo.ficheros/1925127-Protocolo%20de%20actuaci%C3%B3n%20coordinada%20de%20la%20farmacia%20con%20los%20Centros%20de%20Salud%20en%20el%20PAI_Febrero%202021.pdf [Acceso: 06/06/2023]

[9] Terapia cognitivo conductual. Mayo Clinic. Disponible en: Terapia cognitivo conductual - Mayo Clinic [Acceso: 07/06/2023

 

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