Potenciar la categoría infantil de la farmacia

Lun, 02/09/2019

La gestión por categorías es un método de gestión muy útil para la farmacia, ya que puede ayudar a rentabilizar los recursos y ofrecer una experiencia mejor al paciente. Pero algunas categorías pueden tener características muy particulares respecto a las otras: este es el caso de la categoría infantil.

Esta categoría incluye desde productos de alimentación, como las leches infantiles (sin descuidar las leches especiales para niños con intolerancia) hasta otros utensilios como chupetes, biberones, tetinas… Tampoco hay que dejar de lado la cosmética infantil, que incluye tanto cremas como geles o hidratantes, entre otros. [1]

Particularidades de la sección infantil

Trabajar la categoría infantil en una farmacia no siempre es fácil. Esta sección presenta sus propias dificultades: [1]

Son compras muy sensibles a los precios.
Algunos productos son muy voluminosos y ocupan mucho espacio de exposición.
La natalidad en España está en descenso en los últimos años.

Pero hay que tener otras cosas en cuenta, como que el público infantil es un cliente muy particular. Los niños nacidos son muy deseados, así que los padres acostumbran a estar más predispuestos a invertir en su salud. [1]

Las madres y padres, especialmente primerizos, la mayor parte de las veces valorarán mucho poder resolver sus dudas y hacer consultas sobre productos. Por eso, trabajar sobre este tipo de público puede ser una gran herramienta para fidelizar a los visitantes de la farmacia. [2] Son lo que se conocen como categorías de tráfico: generan un gran volumen de clientes, siendo las promociones muy importantes para mantener el flujo de usuarios constante.

Medidas para trabajar la categoría infantil

Lo ideal para una farmacia es poder dedicarle a esta sección el espacio que necesita. En algunas farmacias llega a ocupar el 25% de espacio de exposición, por lo que una medida podría ser unificar dos categorías (como “bebé” y “mamá”) y diferenciarla de forma clara. [1]

Algunas pautas para gestionar de forma óptima la categoría infantil pueden ser: [1][3]

Ubicar la categoría infantil en una zona amplia y de fácil acceso.
Ubicarla en un “punto frío”, ya que estos productos se consideran un “producto de destino”.
Tener un buen surtido de referencias y marcas, ya que estos consumidores son reacios a comprar productos sustitutivos para sus hijos.
Si se cree conveniente, apostar por esta categoría y convertirse en especialista.
Organizar la categoría por grupos como “alimentación”, “higiene” y “productos infantiles”.

El valor del consejo farmacéutico

El consejo farmacéutico infantil puede ser un gran aliado para fomentar la confianza entre padres y madres primerizos y el farmacéutico. Si estos papás y mamás, sobre todo los primerizos, están satisfechos con su atención farmacéutica, será más fácil que vuelvan a la farmacia. [2]

Algunas iniciativas de valor que puede aportar el personal de farmacia ante el consumidor infantil son: [2]

Dar consejos que puedan mejorar su calidad de vida.
Adelantarse a futuras necesidades con sus conocimientos farmacéuticos.
Velar por el cuidado y la prevención de bebés y niños.

Los primeros años de vida son especialmente delicados, ya que el bebé puede tener entre 8 y 10 afecciones al año. Por ello es vital velar por la salud de los más pequeños y aconsejar a sus padres sobre su cuidado. [2]