La tecnología, una aliada en la adherencia terapéutica
Las causas de una baja adherencia pueden ser multifactoriales: desde la complejidad de los tratamientos y los efectos secundarios percibidos, la falta de conocimiento de la enfermedad o bien la ausencia del apoyo familiar y de una relación adecuada con el médico y el seguimiento de la enfermedad [1]. Por este motivo, es fundamental la labor del profesional farmacéutico para dilucidar todas las dudas que le puedan surgir al paciente.
Conociendo que en España el 61,9% de la población es internauta, y la mitad de este porcentaje busca información sobre salud en internet, desde la oficina de farmacia es importante saber explotar este contexto.[2]
Nuevas posibilidades tecnológicas para la adherencia médica
A continuación, enumeramos algunas de las innovaciones que se están introduciendo en el ámbito médico y farmacéutico.
Códigos QR
Los códigos QR permiten realizar un escaneo de forma rápida y eficaz sobre un producto farmacéutico. Es un método usado para ayudar a la educación del paciente, en la eficiencia y precisión de la prescripción médica y para incrementar la medicación segura en pacientes de la tercera edad.[3]
En Estados Unidos hay algunas farmacias como Hobbs Pharmacy en Florida que actualmente recurren a códigos QR para proveer a sus pacientes un acceso más rápido y amplio a sus medicamentos. Tras escanear los códigos, se redirige al usuario a una web específica con videos e información exacta de guías médicas donde aparecen los efectos secundarios, las instrucciones de uso o cómo administrar correctamente un producto.[4]
Y no solo para los pacientes: en Taiwán se implementa esta herramienta para transmitir la información clínica sobre un paciente desde el hospital a la farmacia.[3]
Wearables
El término wearable remite al concepto de dispositivos que el paciente puede llevar encima. Encontramos desde sensores, pulseras o relojes hasta smart glasses con el objetivo de informar a profesionales sanitarios de cualquier anomalía en el paciente.
La Universidad Politécnica de Madrid, por ejemplo, está trabajando con sensores que se colocan en objetos de la vida cotidiana para monitorizar los movimientos del paciente y hacer un seguimiento de cómo manejan su día a día personas con enfermedades como el Alzheimer, y así detectar si han tomado o no correctamente la medicación. Estos sensores están íntimamente relacionados con aplicaciones móviles, donde se recopila y se trasladan los datos a los facultativos.[5]
Otros gadgets como guantes, cascos o pulseras se están convirtiendo en sistemas de recogida de información cardiovascular, tensión arterial o la temperatura corporal.
Sin embargo, este concepto va más allá y se incluyen también pastillas digitales, es decir, sensores comestibles que pueden ayudar a monitorizar la presencia de la píldora en el organismo del paciente gracias a un parche receptor. En 2017, la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos aprobó este gadget en pacientes con desórdenes mentales.[5]
Realidad virtual
Los pioneros en este ámbito es los Estados Unidos, donde la compañía Limbix ha presentado un sistema de realidad virtual que permite al paciente una inmersión total en ambientes como la naturaleza para poder relajarse o para superar sus miedos. Esta técnica permite que el paciente pueda tolerar mejor la ansiedad y sus miedos y pueda seguir sin temor la medicación.
Aplicaciones móviles (MHealth)
Las aplicaciones móviles proliferan en el ámbito de salud como vía a los diferentes dispositivos wearables o los códigos QR, que dependen en gran medida de las apps para enviar o escanear información.
Además, la farmacia dispone de aplicaciones móviles diseñadas para crear una mayor adherencia a la terapia de los pacientes, como la app Care4Today.
En el ámbito nacional, el Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos (CGCOF) continúa desarrollando NodoFarma. Se trata de una plataforma que permitirá generar dossiers farmacéuticos con medicación y prescripción pública y privada que facilitará el autocuidado y la atención farmacéutica.
Referencias
[1] Plan de Adherencia al Tratamiento. Uso responsable del medicamento. SEFAC (Sociedad Española de Farmacéuticos Comunitarios y de Familia). pág.30 (2016) Disponible en: https://www.sefac.org/sites/default/files/sefac2010/private/documentos_sefac/documentos/farmaindustria-plan-de-adherencia.pdf [Acceso: 17/09/2019]
[2] Álamo, S., Benito, P. La adherencia terapéutica y el uso de las TICs en la población adolescente con enfermedad crónica. Universidad Autónoma de Madrid. pág.17 (2016). Disponible en: https://repositorio.uam.es/bitstream/handle/10486/680421/alamo_guadalix_sheilatfg.pdf?sequence=1&isAllowed=y [Acceso: 10/09/2019]
[3] Gonzalez-Argote, J., Garcia-Rivero A. Códigos QR y sus aplicaciones en las ciencias de la salud. Revista Cubana de Información en Ciencias de la Salud (2016). Disponible en: http://scielo.sld.cu/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S2307-21132016000200008 [Acceso: 10/09/2019]
[4] Pharmacies Leverage QR Codes, Video to improve Medication Adherence. URAC (2018) Disponible en: https://www.urac.org/blog/pharmacies-leverage-qr-codes-video-improve-medication-adherence [Acceso: 10/09/2019]
[5] Pablo Linde. ¿En qué puede sustituir una aplicación de móvil a su médico? (2015) www.elpais.com Disponible en: https://elpais.com/elpais/2015/05/21/buenavida/1432198163_619344.html [Acceso: 10/09/2019]
[6] Joszt, L. 5 Things About Wearable Technology in Healthcare. The American Journal of Managed Care (AJMC) (2018). Disponible en: https://www.ajmc.com/newsroom/5-things-about-wearable-technology-in-healthcare [Acceso: 10/09/2019]