En el pasado, el trabajo del farmacéutico comunitario se limitaba en Estados Unidos a la dispensación de medicamentos, pero la tendencia es ofrecer cada vez más atención sanitaria y servicios desde la Oficina de Farmacia.
La creciente demanda de servicios de Atención Primaria y de urgencias se podría reducir si se produjera un "cambio radical" en el papel de los farmacéuticos.