Desde la farmacia debemos informar sobre cómo prevenir las infecciones, recomendar a nuestros clientes una higiene de manos adecuada y asesorar acerca de la toma adecuada de antibióticos.
Cada vez es más importante la lucha por un uso más racional de los antibióticos y los farmacéuticos juegan un papel vital en la planificación y atención al paciente.